Los datos que estimulan a Uruguay

Uruguay conoció en los últimos días cifras alentadoras de la economía, que colocan al país en proceso de largo crecimiento y estabilidad. La  balanza comercial mostró un record histórico positivo. La inflación se ubicó en el rango meta con la tendencia a la baja, el producto crece por decimoquinto año consecutivo y sus niveles de distribución son buenos de acuerdo a los indicadores de referencia. Casi 50 mil personas salieron de la pobreza llevando ese indicador a un 7,9% y la mortalidad infantil está en límites históricamente bajos.

La economía uruguaya creció 2,7% del Producto Bruto Interno (PBI) en 2017. En el cuarto trimestre del año pasado, el PBI tuvo una tasa de crecimiento interanual de 2%, por desempeño positivo en los sectores transporte, almacenamiento y comunicaciones (crecimiento de las telecomunicaciones), comercio, reparaciones, restaurantes y hoteles (aumento en actividad de restaurantes y hoteles).

Durante 2017, se redujo el saldo negativo de la balanza comercial. Las exportaciones crecieron 7,6%, mientras que las importaciones cayeron 0,4%, a este dato conocido en el Informe de Cuentas del Central se suma que las exportaciones crecieron 17 % en el primer trimestre de 2018, teniendo el mejor desempeño de los últimos cinco años.

Por su parte la inflación acumulada de los últimos 12 meses bajó y volvió a estar dentro del rango meta que fija el gobierno, que tiene un techo de 7%. En febrero el IPC acumulado subió a 7,07%, pero en marzo bajó a 6,65%. En marzo los precios se incrementaron 0,28%, llevando la variación en lo que va del año a 3,90%.

Otro dato que dio estímulo a los funcionarios de gobierno fue la baja de la pobreza. La estimación de personas por debajo de la línea de pobreza en todo el país bajó de 9,4 % en 2016 a 7,9 % en 2017 y confirma la tendencia decreciente iniciada en 2006, según el último informe elaborado por el Instituto Nacional de Estadística. Mientras para el total del país la pobreza ascendía a 32,5 % en 2006, en 2010 el registro se ubicó en 18,5 %, y en 2017 descendió a 7,9%. A esto se suma el índice de mortalidad infantil que bajó en 2017 de 7,9 cada 1.000 nacidos vivos en 2016 a 6,6 cada mil, índice que se ubica en su mínimo histórico.